El tiempo de Ricardo Gareca como técnico de la Selección de Chile finalizó este martes 10 de junio después de la derrota 2-0 contra Bolivia en El Alto. “Se terminó el proceso”, aseguró en la rueda de prensa posterior al partido, que terminó con la eliminación de los australes del Mundial.
“Tomamos una decisión con el cuerpo técnico. Tuve una reunión en el vestuario con todos los directivos, incluyendo al presidente y con la delegación en la que comunicamos que queríamos descomprimir la situación. Nos sentimos muy contenidos (respaldados) en la estadía en Chile”, aseguró el entrenador argentino, de 67 años.
El timonel, quien llegó a la Selección chilena en enero del 2024, manifestó además que quería agradecer a los jugadores y dirigentes por el apoyo que le dieron durante el tiempo que estuvo en el país austral, donde recibía un salario anual de 3.5 millones de dólares.
“Intentamos pelear hasta el final”, prosiguió el timonel, que llegó al equipo chileno con la esperanza de llevarlos de nuevo a un Mundial después de dos “fracasos” en el camino a Rusia 2018 y Qatar 2022, pero no logró su objetivo. En parte, el mal rendimiento de ese país se debe a que han tenido muchos problemas para consolidar un recambio generacional, como ocurrió antes con Paraguay o Uruguay.
Entre los llamados para el duelo contra Bolivia estuvieron futbolistas veteranos como Arturo Vidal (38 años) y Alexis Sánchez (36), que eran las dos grandes figuras de ese equipo nacional. “Quiero dejar en claro que nunca hubo un tema económico. En ningún lado le he hecho juicio a nadie. Solo teníamos que ponernos de acuerdo. Sentí el respaldo de la dirigencia. Ellos entendieron y más allá de las incidencias que pueden haber, conté con el apoyo”, agregó Gareca, de quien se dijo que no renovaría su contrato con el equipo por diferencias de dinero.
De acuerdo con la prensa chilena, su rendimiento del 17,9% es el peor en la historia de una Selección que, en las últimas eliminatorias, ha contado con técnicos de renombre como el colombiano Reinaldo Rueda, quien renunció para dirigir a Colombia en el camino a Qatar.
Gareca dejó atrás los rendimientos de 25,9% de Pedro Mazullo, quien estuvo al frente de la Selección entre 1936 y 1939, así como de Pedro García, quien tuvo nueve encuentros como técnico de Chile en 2001.