Es un número con gran carga simbólica en la historia del fútbol, asociado a leyendas como Johan Cruyff, Thierry Henry y Xabi Alonso, entre otros.
Luis Díaz, el ídolo colombiano que ha maravillado al mundo con su desequilibrio, velocidad y carácter, iniciará una nueva etapa en su carrera en uno de los clubes más grandes del planeta: el Bayern Múnich. Pero su llegada no sólo representa un nuevo desafío futbolístico; también simboliza la continuidad de un legado histórico, al asumir un número cargado de significado: el dorsal 14.
Aunque en el imaginario colectivo el 10 o el 7 son los dorsales que habitualmente encarnan la genialidad o el protagonismo, el número 14 ha ido tejiendo su propia mística a lo largo del tiempo. Y parte de esa magia nació con el futbolista que cambió para siempre la forma de entender este deporte: Johan Cruyff. El genio neerlandés, ícono del Ajax, el FC Barcelona y la selección de Países Bajos, pidió usar el 14 en un momento en que elegir el número no era costumbre. No sólo lo convirtió en parte de su identidad, sino que le dio un sentido de creatividad, irreverencia e influencia táctica que todavía perdura. En Países Bajos, fue el número del capitán de la Naranja Mecánica que maravilló en el Mundial de 1974. Y tras su retiro, el Ajax retiró el dorsal 14 en su honor.
Siguiendo ese rastro brillante, otros grandes del fútbol también escribieron su historia con ese número en la espalda. Thierry Henry, por ejemplo, vivió su época dorada con el Arsenal usando el 14. En Highbury, se convirtió en una leyenda, marcando más de 200 goles y dejando una huella tan profunda que aún se le asocia automáticamente con ese dorsal.
En América del Sur, Javier Mascherano se volvió emblema de carácter y entrega en la selección argentina portando el 14. Jugó cuatro Copas del Mundo y se convirtió en el segundo jugador con más partidos en la historia de la Albiceleste. Para muchos, su imagen con la camiseta número 14 es sinónimo de liderazgo silencioso y entrega sin límites.
En Alemania, la historia también ha estado marcada por el 14. Xabi Alonso, volante español de enorme jerarquía, lo usó en varias etapas de su carrera, incluido su paso por el Bayern Múnich. Campeón del mundo con España y figura en clubes como Liverpool y Real Madrid, Xabi dio al número un aire de clase y visión. Antes de él, Stefan Effenberg, uno de los grandes nombres del club bávaro en los años 90, también defendió los colores del Bayern con el 14 en la espalda.
Y hablando del Real Madrid, Casemiro escribió su historia de grandeza continental portando ese mismo dorsal. El mediocampista brasileño fue clave en cinco títulos de Champions League entre 2014 y 2022, transformándose en una de las columnas vertebrales del equipo más laureado del mundo.
Ahora, el turno es de Luis Díaz. Con el 14 en la espalda, el colombiano se une a una selecta lista de figuras que hicieron historia con ese número. Su talento, entrega y ambición le abren la puerta para, no sólo ser un fichaje estelar del Bayern Múnich, sino para escribir su propio capítulo en la rica historia de este dorsal. Ya lo ha demostrado en el Porto, con Colombia y en el Liverpool; pero en Alemania puede consolidarse como uno de los grandes.
Otros futbolistas que también dejaron huella con el número 14 incluyen a Gerson, el brillante volante de la selección brasileña campeona en 1970; Blaise Matuidi, campeón del mundo con Francia en 2018; Xherdan Shaqiri, quien llevó el 14 con Suiza en varias Copas del Mundo; y Philippe Coutinho, quien lo usó en su etapa con el Liverpool.
Hoy, el 14 ya no es un simple número. Es un símbolo. Un mensaje de que quien lo lleva no es uno más: es alguien que busca dejar huella, que asume un legado y que quiere construir el suyo propio. Luis Díaz está listo para hacerlo en Múnich, con el corazón de La Guajira latiendo fuerte bajo una camiseta que ya empieza a tener historia.
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