El presidente Donald Trump declaró que no se siente obligado de informar al Congreso de Estados Unidos para llevar a cabo eventuales ataques contra Venezuela, y señaló que temía algún tipo de filtración por parte de los legisladores.
“No me importaría pero (...) no tengo [por qué] decírselo. Está comprobado, pero no me molestaría en absoluto”, afirmó el mandatario cuando una periodista le preguntó si pensaba solicitar el visto bueno del Congreso para realizar ataques terrestres en Venezuela.
“Solo espero que no lo filtren. Ya sabes, la gente lo filtra. Son políticos, y filtran como un colador”, agregó el republicano.
Trump ha amenazado en varias ocasiones con lanzar ataques en suelo venezolano para apuntar a los carteles de la droga.
El ejército estadounidense lanzó en septiembre una campaña de ataques contra embarcaciones a las que acusa de transportar drogas en el Caribe y en el Pacífico, que han dejado al menos 99 muertos.
El Pentágono informó al Congreso que Estados Unidos está en “conflicto armado” con los carteles de droga latinoamericanos, los designó como grupos terroristas y se refirió a los presuntos contrabandistas como “combatientes ilegales”.
La ONU, expertos y oenegés han cuestionado la legalidad de estas operaciones.
Legisladores de la oposición demócrata, pero también de la mayoría republicana en el Congreso, consideran que el presidente no tiene la autoridad legal para hacerlo y que cualquier eventual intervención terrestre requeriría el aval del Legislativo.
Sin embargo, la Cámara de Representantes rechazó el miércoles dos textos que buscaban regular por ley estos ataques. En el Senado también fracasaron medidas similares.
“El presidente no ha demostrado la autoridad necesaria bajo la legislación estadounidense o internacional para llevar a cabo ataques militares letales contra estas embarcaciones”, declaró el legislador demócrata Gregory Meeks durante un debate en la cámara baja.
“Nadie puede afirmar de manera creíble que estos barcos (...) representaran una amenaza inminente para el pueblo estadounidense que justificara el uso de la fuerza militar”, dijo Meeks.
Lea más: EE. UU. expone los motivos de la incautación del buque petrolero en aguas cercanas a Venezuela
La administración Trump argumenta que el presidente está en su derecho, puesto que estos ataques se inscriben bajo un “conflicto armado” que Washington inició contra los carteles de la droga, a los que calificó previamente, a principios de año, de “organizaciones terroristas extranjeras”.
Según la Constitución estadounidense, aunque el presidente es el comandante en jefe de las fuerzas armadas, solo el Congreso tiene la autoridad para declarar formalmente la guerra.
Pero desde hace varias décadas, en lugar de tal declaración formal, los presidentes se han apoyado en resoluciones del Congreso para llevar a cabo operaciones militares limitadas en el extranjero, especialmente en Afganistán.
Relacionado: Petro denuncia que “lancheros bombardeados” hallados en Colombia podrían ser dominicanos